jueves, 30 de septiembre de 2010

El que es grande es grande

Se nota cuando un equipo es grande. Quizá después del empate del Barça en Kazan y tras ver que sólo ha conseguido 2 puntos de 9 posibles contra el Rubin sea irónico decirlo, pero es verdad. Bien cerca tenemos dos ejemplos. Primero, el Madrid. Fue a Auxerre y, sin jugar bien, ni atacar con excesiva contundencia, consiguió ganar con un golazo de Di María en el 80. El Auxerre pudo sacar un puntito e incluso marcar algún gol, pero los grandes equipos tienen algo que les hace ganar por inercia. El segundo ejemplo es el Valencia. No es tan claro este ejemplo, ya que el Valencia es un equipo de talla mundial grande de España y de Europa, pero hay un salto grande hasta la línea del M. United. El Valencia atacó más, jugó mejor, lo intentó con más ganas, y no consiguió meter. El Manchester tuvo tres tiros en todo el partido, pero esos tres tiros pudieron hacer una goleada injusta a todas luces (incluso el 0-1 fue injusto): primero una de Berbatov, que en una isla entre los defensas valencianistas consigue sacar un tiro que César despeja bien. Después una de Chicharito al palo. Y por último el gol, obra de arte ese control por parte del mexicano. Así, con 3 tiros, pocas ganas y bajas sensibles el United gana por lo que es, un grande.